Cuando se le preguntó al líder religioso judío, Hillel, que explicara la Torah (equivalente a la Biblia Hebrea), se remitió a decir "No hagas a tu prójimo aquello que odiarías para ti mismo. Esa es toda la Torah. El resto es la explicación".
Ser capaz de sintetizar y resumir en pocas palabras o conceptos las grandes directrices, acerca de cómo construir sociedad armónica, vivir una vida virtuosa, gestionar empresas y equipos sobresalientes, o cualquier otro gran objetivo, es una de las capacidades fundamentales de los líderes efectivos.
Esos líderes son capaces de tomar una perspectiva amplia y estratégica de las situaciones, tomando cualquier conversación y "elevándola" a un nivel superior de abstracción, que abarca múltiples conceptos o enfoques.
Por eso, una pregunta que utilizo mucho en mis entrevistas con altos ejecutivos, por ejemplo, cuando me cuentan que han tenido un gran logro (internacionalizar su compañía, conquistar nuevos mercados, mejorar la satisfacción de los clientes, etc.) es "perdona la ignorancia, pero eso que me acabas de contar, ¿cómo se hace? ¿cuáles son los 3 o 4 factores clave? o ¿qué marca la diferencia en que uno lo logre o no?"
Mi experiencia es que, quienes realmente saben de lo que están hablando, son capaces de explicarlo clara y brevemente. Dicen algo como "Mira, en realidad, lo que importa son estas 3 cosas". O, "los 5 pasos clave son..."
Por otra parte, las personas que no saben o no tienen la experiencia real se dan cincuenta vueltas para explicar y se limitan a mencionar generalidades o, lo que es peor, utilizan palabras rebuscadas o que parece que suenan bien (lo que en inglés se llama "hype" o "buzzwords").
Pero esta capacidad de síntesis y de "elevar" la conversación no es solo importante para comunicar y motivar a los colaboradores o seguidores.
En realidad, el mayor valor viene de que, al estar basada esa síntesis en principios más generales, es mucho más fácil transportar la experiencia a distintas industrias y situaciones. Porque los principios no cambian; solo cambia la aplicación específica o las adaptaciones que hay que realizar a una situación determinada.
Eso permite a los líderes mucha mayor versatilidad y mayor amplitud de ámbitos donde ejercer su influencia.
Uno de los mejores CEOs que he tenido la fortuna de conocer se destaca por su capacidad para identificar "los tres pilares clave" de cualquier plan estratégico y comunicarlos con claridad a toda su organización, logrando una alineación casi automática.
¿Y tú? ¿Eres capaz de explicar aquello que quieres que tus colaboradores logren o la gran iniciativa que deseas lanzar brevemente, en siete palabras, o menos?
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Autor
Rodrigo Del Campo
Director Ejecutivo
Emprendedor y consultor en efectividad organizacional. Desde 1997 apoya a ejecutivos y equipos gerenciales en la creación de organizaciones de alta efectividad. Se ha especializado en el diagnóstico y desarrollo de líderes, equipos y organizaciones, utilizando las herramientas y metodologías más avanzadas a nivel global para determinar su potencial y maximizar sus capacidades y efectividad.